Galerías anchas. Los corredores en las casas de dos plantas
En casas rurales de cierta envergadura aparece otro tipo de galerías más espaciosas, que pocas veces se emplazan en la fachada exterior. Por regla general quedan reservadas de cara a la propiedad privada, un patio, huerto o explanada interior. Semejantes a las solariegas galerías de las grandes casas urbanas y de ciudad, las galerías de casas rurales son más anchas que las descritas en el capítulo anterior, casi siempre resguardadas por muros en sus flancos laterales, como los corredores vistos en casas de una planta (capítulo 6). Además de servir de pasillo para comunicar habitaciones son una parte esencial de la vivienda, destinada a diversos usos. Cerradas o no, los corredores que aparecen a continuación son visiblemente más anchos y tanto el armazón del suelo como el del tejado se sostienen sobre los vigas, que se apoyan entre la pared y una viga más gruesa sostenida por pilares de madera o pies derechos.
Tuvo su mayor desarrollo en los últimos siglos de la tradición, hasta convertirse en el corredor tradicional, plataforma austera que dio personalidad a la arquitectura popular canaria.

Dibujo 85.
Como primer ejemplo de galería ancha, puede valer este sobrio andamiaje con antepecho simple de tablas, que cumple con la función de facilitar el paso y abrigar las entradas de un módulo lineal. Aquí se ve clara la diferencia a la que hace referencia el párrafo anterior, es decir, el contraste entre el balcón o galería de casas urbanas y este otro sencillo y más representativo balcón de la cultura popular: el corredor.

Dibujo 86.
Aquí se puede ver uno de los modelos más comunes de los corredores en casas de dos plantas. Sobrio y simple pero elegante y compacto. Corresponde a propietarios de nivel medio. Es muy frecuente verlas cómo cubren los flancos con gruesas paredes o, como en este caso, por uno de los costados con la prolongación del módulo en forma de L. El desarrollo de la escalera queda cubierto bajo el propio corredor, toda la escalera de madera o con el tramo inferior de mampuesto.
Cuando un terreno o un camino se arrima por detrás a la pared de la casa baja (planta baja), la solución más práctica y repetida para evitar las humedades era instalar una "mina". Así llamaban a una cuneta o túnel estrecho de drenaje, que desagua por una abertura practicada en un lateral (observar su costado derecho) y así permitir su limpieza, aunque no siempre está abierto.
Dibujo 87.
Estas casas suelen tener otros módulos agregados y la escalera puede no estar integrada en el corredor, al descubierto, como muestra la siguiente ilustración.

Le siguen dos perspectivas de otra vivienda para destacar un modelo de casas perdidas en medio de huertas fértiles de tierras altas, en las que el corredor se esconde en el interior, presidiendo el recinto privado donde se emplaza el patio, no siempre cerrado, aunque en este caso dispone de un muro con portalón (se muestra transparente para no ocultar la escalera).

Dibujo 88.
A la derecha el apunte de la misma casa vista por la espalda. No es frecuente que se den las características de esta casa, que a pesar de abrirse hacia terrenos y a servidumbres pertenecientes a la propiedad, tenga una presencia esmerada, con ventanas en la planta alta de cantería labrada en arco y otros detalles. Desde este ángulo se puede apreciar bien la entrada principal.


Dibujo 89. Ejemplo de casa de dos plantas con corredor en L.
GALERÍAS CERRADAS.

Dibujo 90.
Los corredores cerrados con un tableado, propios de climas extremos, se han conservado más en Tenerife, aunque también se encuentran en otras islas. Conviene observar cómo las habitaciones han sido techadas a cuatro aguas de forma independiente. En La Palma principalmente había costumbre de construir pequeñas habitaciones alineadas o no, cubiertas de esta forma.

Dibujo 91.
Esta es una modalidad de corredor cerrado, con tabiques y ventanas en vez de tablas, lo cual convierte el corredor en una estancia más de la casa. Como las habitaciones no ventilan bien a través de la galería, tienen ventanas hacia otros lados. Hace poco más de un siglo, cuando aún prevalecía la casa tradicional, aparecieron los acristalamientos en ventanas y galerías cerradas.
El siguiente dibujo muestra otra vista de la misma casa desde un callejón próximo al caserío, alcanzándose a ver el corredor cerrado. Aquí está la novedad.

LA DOBLE FACHADA EN CASAS RURALES URBANAS DE DOS PLANTAS
La superpoblación actual hace que el terreno para construir sea escaso y al crecer, los pueblos se parcelan en solares angostos, dejando ver solamente hileras de fachadas comprimidas. En otros tiempos se disponía de más espacio para rodearse de naturaleza. En realidad constituían caseríos envueltos en huertos y por eso había posibilidad de conservar este estilo de vivienda, donde detrás de la fachada se escondía ese otro semblante reservado a la familia, con el corredor presidiendo.

Dibujos 92, a y b.
Se insiste en este tipo de vivienda casi urbana, que presenta sólo la fachada que está a la vista del público que va de paso, pero esconde detrás la parte más llamativa y la que para mi representa más la arquitectura popular.
Los ejemplos que están encima corresponden, primero a la fachada exterior, que además cuenta con entrada directa al patio por un lateral, dejando ver la terminación de un corredor no del todo escondido.
El segundo dibujo muestra el semblante oculto de la misma vivienda, reservada para los que la habitan y para las personas que pueden acceder al interior. Paseamos por caminos y por callejones de pueblos antiguos, sin poder siempre disfrutar de las modestas y acogedoras reliquias que aún quedan.

Dibujo 93.
Algunos de los ejemplos anteriores muestran propiedades de familias pudientes, pero en este otro se evidencia un nivel más discreto. Es el caso de la vivienda levantada en un terreno desnivelado, cuya planta superior está a ras de la carretera. Dispone de dos entradas: una directa al patio por una escalera lateral y otra a través de las habitaciones altas, que tiene salida al corredor y atraviesa el módulo en L. Hoy día esta vivienda está transformada y totalmente desfigurada.
Estos han sido los modelos más representativos de las casas con corredor, el auténtico balcón canario.